Creas separaciones ante una exterioridad de puntos suspensivos, de intermedios prolongándose en interminables mudeces, en trazos y aperturas sin conclusión... Tú: muro murado, incomunicada muralla ante tanto rostro desfigurado, ante tanto vaho disipándose en rugosos embriones de naderías, ante tanta mortecina confusión en medio de territorios al margen de lo conocido.