jueves, 31 de marzo de 2011

SENTIMOS, A VECES...

Sentimos, a veces, que lo poseemos todo; que nuestros espacios son firmes, indestructibles; que nuestros pasos son seguros y nuestro destino, cierto. Y de pronto... El suelo bajo nuestros pies se resquebraja; el techo de lo que hasta hace poco eran certezas absolutas se desmorona sobre nuestras cabezas, mientras desesperadamente tratamos de escapar como sea de ese hasta entonces seguro lugar que comienza a hundirse con estrépito.

LABERINTO E INTEMPERIE...

Laberinto e intemperie: sitios de inhóspita soledad en los que encarnan algunas inexorables pruebas a las que nos somete la vida.


Laberinto e intemperie: metaforizaciones posibles del camino: como desorientación, como interminable circularidad o como proliferación de vaivenes sin sentido...

ROSTROS

A veces prójimos pero muy rara vez realmente próximos, nos rodean los rostros: amistosos o inamistosos, agradables o desagradables, imprescindibles o superfluos, cercanos o lejanos, comprensibles o impenetrables, apacibles o coléricos, inteligentes o estúpidos... Los rostros: los contemplamos con sus cambiantes gestos; a menudo confusos, engañosos o impredecibles, acercándose o alejándose de nosotros generalmente de acuerdo a nuestra voluntad de acercarnos o alejarnos de ellos.

miércoles, 30 de marzo de 2011

LO QUE A NUESTRO ALREDEDOR...

Lo que a nuestro alrededor percibimos como amenazante, a la larga, fortalece nuestra lucidez. Estamos alertas en medio de esa percepción de vulnerabilidad que, a veces, nos acompaña.

ME ES PRECISO...

Me es preciso acercarme a ciertos rostros que realmente me importan. Y limitarme a ellos.

martes, 29 de marzo de 2011

ESPIRAL: FORMA DEL GIRO...

Espiral: forma del giro que, en movimiento circular, va expandiendo más y más el sentido de un determinado espacio. Espiral: metáfora del tiempo, de la vida y de la experiencia entretejiéndose al interior de ese diseño de una creciente espiral compuesta de acción y de memoria.

lunes, 28 de marzo de 2011

LO ABIERTO, LO CERRADO

Abierto es lo amplio, lo grande, lo vasto; cerrado, lo pequeño, lo parcial, lo estrecho. Abiertos son los lugares inmensos y recorribles; cerrados, los sitios limitados y cobijantes. Ambas nociones, apertura y encierro, pueden evocar, por igual, visiones de valor o antivalor. Dentro de lo abierto, valor serían la amplitud relacionada a la libertad de movimientos, a los itinerarios repletos de recorridos y hallazgos, a las aventuras interminables dentro de lo maravillosamente desconocido. Antivalor serían la inmensidad relacionada con el desconcierto, el desamparo, el extravío; no la amplitud del viaje, la aventura y la búsqueda, sino el espacio que es sólo desolada intemperie: inmensidad que condena a quien la recorre a vivir en una perpetua errancia. En lo cerrado, valores serían el cobijo, la protección y el amparo de los sitios guarnecedores; el techo y el suelo que nos rodean y mantienen alrededor de un centro innegable y en torno a un tiempo que nos ha ido creando junto a él. Antivalor en lo cerrado serían el encierro que es sólo encierro, la mínima espacialidad; el ínfimo territorio frío y desnudo que nos agobia en inamovilidad forzosa, que nos condena al tedio interminable o a la hastiante reiteración de acciones y movimientos.

LO ÉTICO DEBE SUSTENTAR...

Lo ético debe sustentar la inteligencia, la reflexión, la imaginación, la lucidez; apoyar los hallazgos y las construcciones; orientar el camino y sus diseños y sus significados...

sábado, 26 de marzo de 2011

QUIZÁS LAS GRANDES EXPERIENCIAS DE LA VIDA...

Quizá las grandes experiencias de la vida no sean, a fin de cuentas, sino el descubrimiento de algunas palabras: amor, ideal, felicidad... Escribir la palabra amorosa presupone la comunión de los cuerpos, el fascinante hallazgo del otro opuesto. La palabra del ideal encierra la trágica contradicción de lo inalcanzable. Escribir el ideal es perseguir las monedas de oro que aguardan al final del arcoiris; acariciar la intención del espejismo maravilloso; acosar sueños que, una vez tocados, concluyen al despertarnos. Las palabras felicidad y serenidad son las del final del camino. Las aprendemos tarde. Saber vivir es saber pronunciarlas; haber aprendido de ellas la dicha y el aplomo; haber logrado disfrutar esa única posible felicidad hallada en brevísimos fragmentos, chispazos únicos. Existen, por último, las palabras colectivas: tradición, religión, Dios, patria... Palabras en cuya devoción comulga la tribu, términos deificados en el sueño y en la fe de muchos o de todos, nombres escritos en el ancho designio de la historia común del hombre.

sábado, 19 de marzo de 2011

BAJO EL SIGNO DEL VIAJE Y DE LO VIAJERO...

Bajo el signo del viaje y de lo viajero, José Manuel Briceño Guerrero, en su libro El laberinto de los tres minotauros distingue viejísimos imaginarios relacionados por siempre con nuestra América. El continente americano, dice Briceño, fue y es lugar de paso, encrucijada de gentes que llegaban provenientes de todas partes del mundo; y que, a veces, permanecían en los lugares nuevos, pero que, otras muchas, regresaban a sus sitios de origen para no volver jamás. “En nuestro pasado ancestral colectivo –comenta Briceño- hay siempre un viaje por mar hacia lo desconocido, una separación voluntaria o forzada del mundo originario.” América, pues, como espacio al que llegaban y llegan seres que vienen de lejos, lugar de destino siempre frágil; o, más que sitio de destino: territorio de paso en el que pululan muchos transeúntes de pasos inciertos y de acciones fugaces poseedores de una ética de lo aventurero y lo transeúnte; moral que hace de lo provisional y mutable rutina y que asume que cuanto rápida y fácilmente llega, rápida y fácilmente también se desvanece; ética del habitante convertido en ser de paso que desdeña los esfuerzos sostenidos y la constancia de los propósitos porque supone sólo se medra en el albur de lo imprevisto y en los aleatorios recovecos del azar; moral que impone la convicción de que lo imprevisible o impensable acechan siempre.

viernes, 18 de marzo de 2011

SERENIDAD Y FELICIDAD SON PALABRAS...

Serenidad y felicidad son palabras de final de camino, de los bellos atardeceres. Por ellas volvemos la vista atrás y contemplamos el tiempo recorrido y escuchamos el eco de un pasado que regresa cargado de imágenes, de voces, de redescubiertas palabras.

martes, 15 de marzo de 2011

UNO DE LOS MÁS COMPRENSIBLES ANHELOS HUMANOS...

Quizá uno de los más comprensibles anhelos de cualquier ser humano sea que su rostro pasado y su rostro presente se asemejen; que el tiempo vivido los superponga con gracia y que, armoniosamente, los acerque; que las ilusiones y la frescura de la edad temprana no resulten demasiado estragadas con el paso de los años. “Que la muerte te acoja con tus sueños intactos”, dice Alvaro Mutis en uno de sus versos. Algo que nos recuerda uno de los más antiguos sueños de todo ser humano: que el momento final de su vida no señale muy abruptas contradicciones entre el rostro de antes y ese rostro de ahora con el cual enfrenta la muerte. Que la faz final de cada individuo sea la válida y comprensible metamorfosis de un lejano rostro juvenil y nunca su grotesca, su deformada caricatura.

lunes, 14 de marzo de 2011

JUGAR NOS AYUDA A INVENTARNOS...

Jugar nos ayuda a inventarnos un mundo propio al margen del mundo, un espacio donde somos protagonistas y en el que no cuentan las leyes del afuera. Las normas del juego son creadas por cada jugador y sólo a él atañen. Eso sí, está absolutamente obligado a obedecerlas. Todo juego dependerá siempre de muy delicados equilibrios entre lo reglamentado y lo arbitrario, entre la urgencia de una meta precisa y la inmensa variedad de posibilidades que puedan conducir hacia ella. La lógica del juego es la contradictoria razón de lo sorpresivo en medio de lo previsible, la de lo azariento por entre lo descifrable. El juego es disfrutable en la medida en que quien lo juega sepa aprovecharlo a plenitud: extrayendo de él todas sus posibles opciones, y aprendiendo siempre de las peripecias vividas. El final del juego llegará cuando el jugador así lo decida, y sólo entonces. En el juego se puede ganar y, desde luego, se puede perder. Gana quien se entrega a su juego enriqueciéndose con la duración de ese tiempo en el cual invirtió fe y entusiasmo. Pierde quien no obedece las reglas que él mismo se impuso, minimizando así la importancia de su esfuerzo y debilitando cuanto el juego hubiese podido darle. Si se juega a conciencia, el juego puede llegar a convertirse en algo sagrado; y el jugador llegar a dedicar su vida toda a esa pasión que lo nutre y lo rescata.

domingo, 13 de marzo de 2011

ERNST JÜNGER DIJO...

Ernst Jünger dijo algo que, muy a menudo, me acompaña como sugerencia o como inspiración: “Sólo los hombres libres pueden hacer auténtica historia. La historia es la impronta que el hombre libre da al destino”. Entre esos hombres “libres” que “hacen historia”, Jünger destacó muy especialmente a los artistas: individuos capaces de convertir su vida en expresión, imagen. En la voluntad creadora de un artista, en su necesidad de hacer y de decir, y de hacerlo con estilo, Jünger percibió uno de los actos humanos más dignos y trascendentes.

lunes, 7 de marzo de 2011

EL CONSUMISMO SE ASOCIA...

El consumismo se asocia con la falsa verdad de un ahora que le dice al hombre que es feliz si compra y que es libre si puede comprar. Sobre este espejismo se sustentó, por cierto, el diálogo ideológico más importante de nuestro siglo XX. El mundo capitalista afirmó su superioridad ante el mundo socialista en la medida en que pudo oponer ante éste una ética consumista auspiciadora de falsas formas de felicidad y de falsas formas de libertad. La única y torpe respuesta del mundo socialista totalitario fue la razón de su fuerza militar, de su poderío tecnobélico. Espantosa contradicción entre una superabundancia de misiles y la interminable carencia de todo lo demás. Largas colas de gente hambrienta buscando qué comer y qué vestir, junto a la mortífera grandilocuencia de misiles atómicos llamativamente presentes en cada nuevo aniversario de la Revolución. Misiles y hambre: la fuerza junto a la debilidad, el poder conviviendo con la flaqueza, la potestad de la destrucción junto a la incapacidad de la construcción.

LA REFUTACIÓN DEL NIHILISMO...

La refutación del nihilismo es la curiosidad y la pasión de vivir.

sábado, 5 de marzo de 2011

LA CLARIDAD DE LAS VISIONES...

La claridad de las visiones, los momentos de lucidez, las revelaciones... Chispazos que, tras desvanecerse, dejan imprevistas impresiones: extrañas manchas, difusas nubes cuyas formas cada caminante entenderá como le plazca.

viernes, 4 de marzo de 2011

HACE MUCHO TIEMPO...

Hace mucho tiempo, mi casa empezó a hacerse sólo separación; luego, a medida que me desplazaba por territorios en los que aprendí a reconocer mi rostro en medio de otros rostros, la fui transformando en morada desde la que tendí puentes hacia el afuera. Poco a poco, he aprendido a hacer de mi casa voluntad: de resistencia, de continuidad, de esperanza. Mi casa: sitio donde protegerme de ese sentido inhóspito y carcelario que tantas veces posee la vida; escondrijo del que estarán necesariamente ausentes las intromisiones, los rostros prescindibles, los innecesarios testigos.