viernes, 18 de julio de 2025

Eran los tiempos de nuestros juegos nuestros

             Eran los tiempos de nuestros juegos nuestros. Era el fondo de las cosas que tenían sentido. Era el azar sin miedo al camino. Era sentirse vivo y pleno en un momento. Eran instantes de vida, sin crisis ni riesgos. Eran los sueños de horas que hicimos sin saberlo.