El paraíso con que todos los hombres sueñan; y, sin embargo, diferente para cada uno de ellos. Tiene la forma de un rostro individual sobre el que fueron grabándose los agasajos e infortunios del tiempo. Tiene la forma de personales propósitos y personales ilusiones.
A cada quien su propio paraíso, siempre ajeno a cualquier imagen de paraíso impuesto.