Oportunidad de las palabras: de ella depende su sentido o el desvanecimiento de toda forma de sentido.
Acercarte a la realidad junto a las palabras que eliges para comunicarte con ella, quizá una de tus más humanas aspiraciones.
Esas palabras escuetas, precisas, contundentes, que de manera breve y exacta señalan imágenes y razones, encarnan para ti la más alta virtud de la escritura.
Te entregas y refugias en ciertas voces. A fin de cuentas, “entregarte” o “refugiarte” pueden resultar para ti sinónimos.