Escribo acaso...
Escribo, acaso, para decir eso que me gustaría escuchar de otros o leer a otros.
**** ****
Escribo y…
Escribo y escojo. Es imposible decirlo todo, y escribir me enseña a no decir de más, tampoco de menos.
Escribir también me ha enseñado a callar.
Paradójicamente, quizá escriba porque he aprendido a amar el silencio.