martes, 16 de octubre de 2012

AL LEER RESPONDO...


       Al leer respondo a eso que otro me dice. Mi diálogo con el libro es, sobre todo, mi respuesta a él. Hablar con los libros es hacer de ellos algo real; descubrir influencias que incorporamos al espacio de nuestras propias experiencias. Existen libros (como sucede en general con todo genuino espacio estético) que añaden en nosotros imágenes, rostros, escenas y acciones que quizá nunca llegarán a abandonarnos del todo. Libros que nos guían, que nos señalan opciones a las que acogernos, inconscientemente, sin darnos cuenta, acaso, de que ellos están escribiendo una suerte de subrepticio guión para muchos de nuestros pasos. A través de los libros, podemos identificarnos con gestos y respuestas que nos sentimos capaces de asumir, modelos en los que podemos reconocernos.